Sabíamos que festejar los 20 años de trayectoria educativa del CADS requería un capítulo especial, uno que sobreviviera al paso del tiempo, en tiempos donde es poco lo que sobrevive íntegro a semejante desafío. Tenía que ser un momento artístico, con los chicos y las familias, que hablara del presente y del futuro. Que mostrara valores y compromisos, porque la educación, al menos desde nuestro punto de vista, tiene que formar ciudadanos libres y responsables. La libertad es, acaso, la mayor responsabilidad. Apareció el nombre de Marta Gómez a través de su obra. También la idea de las Islas Malvinas, con un viaje para los estudiantes del nivel secundario. Se armó el equipo para organizar, pensar y trabajar en los detalles. Los chicos ensayaron y escribieron estrofas. Dibujaron abrazos con palabras. Abrazos para encarar el frío y mantener encendido en nuestros corazones aquel episodio desgarrador de 1982. Entre todos cantamos Para la guerra nada. Marta sugirió que el arte nos transforma. Y tuvo razón. Después de este concierto a sala llena ya no somos los mismos. Y eso que todos los días aprendemos y crecemos, a la par de los chicos. Fue una noche especial. Un sueño cumplido. Gracias.
Fotos: Laura Nacc
